Historias Bíblicas para Colorear: Jesús Desafiando la Injusticia
Jesús y la Ley: Desafiando la Injusticia
Curación en el día de reposo (sábado)
En varios pasajes del Nuevo Testamento, Jesús muestra que la compasión y la misericordia están por encima de la rigidez de la ley. Un ejemplo claro de esto se encuentra en la curación que realiza en el día de reposo, también conocido como sábado.
- Mateo 12:9-14 relata cómo Jesús sana a un hombre con la mano seca dentro de la sinagoga. A pesar de que las leyes judías prohibían realizar trabajos en sábado, incluyendo actos de curación, Jesús desafía esta interpretación legalista y actúa con compasión.
- Marcos 3:1-6 y Lucas 6:6-11 también narran esta historia, subrayando que el bienestar del ser humano es prioritario.
En estos pasajes, Jesús pregunta a los presentes si es lícito hacer el bien en sábado. La respuesta implícita es que el amor y la ayuda hacia los demás no deben ser limitados por normas rígidas. Este acto demuestra que la verdadera intención de la ley divina es promover la vida y la salud, no imponer restricciones que ignoren las necesidades humanas.
Perdón a la mujer adúltera
Otro momento crucial en el ministerio de Jesús es su encuentro con una mujer acusada de adulterio.
- Juan 8:3-11 describe cómo los fariseos y maestros de la ley traen a una mujer sorprendida en adulterio ante Jesús, esperando que Él apruebe su ejecución mediante apedreamiento, conforme a la ley de Moisés. En lugar de cumplir con esta ley, Jesús desafía a los acusadores con una profunda verdad: "El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella".
Esta respuesta revela la hipocresía de los acusadores y subraya la necesidad de introspección y misericordia. Jesús no solo perdona a la mujer, sino que también enfatiza que nadie está libre de pecado y, por tanto, no tiene el derecho de condenar a los demás sin reconocer primero sus propias fallas.
Reflexión
Estos dos eventos destacan el mensaje central del ministerio de Jesús: la ley debe servir a la humanidad, no someterla a cargas injustas. Al desafiar las leyes que carecían de compasión, Jesús enseña que el amor y la misericordia están en el corazón de la verdadera justicia divina.
Jesús nos invita a mirar más allá de la letra de la ley para entender su espíritu. En ambos casos, su ejemplo nos llama a actuar con amor, compasión y justicia, priorizando siempre el bienestar de nuestros semejantes.